Cómo utilizar la voz para persuadir y convencer a cualquier público

Muchas veces nos enfrentamos al desafío de convencer a otras personas de lo que estamos diciendo. No me refiero a que si el Barça es mejor que el Real Madrid o al revés. Hablo de vender una idea, un proyecto o, simplemente, salir con éxito de una entrevista de trabajo. En todas estas ocasiones se trata de persuadir con la voz y tener un discurso creíble.
Puedes contar con los mejores argumentos, tu proyecto puede ser inigualable, pero si no lo sabes transmitir y que los demás perciban credibilidad en tu voz y tu mensaje, te enfrentarás al fracaso. Persuadir con la voz requiere manejar una serie de habilidades de las cuales voy a hablarte en esta oportunidad.
¿Por qué es importante persuadir con la voz?
No existe arma más poderosa para persuadir que la voz. Una comunicación exitosa y un discurso creíble necesitan de ciertas habilidades para transmitirlo. Esas habilidades, en algunas personas son innatas y otras deben desarrollarlas.
Persuadir con la voz es una tarea a la que nos enfrentamos a diario. La mayoría de las veces sin darnos cuenta. Si vamos a una tienda, el vendedor lo que hará es intentar persuadirnos a través de su discurso. Nos va a exponer todos los argumentos para que compremos un producto determinado. Y aquí comienzan los problemas.
Si el vendedor habla muy rápido, nuestro cerebro se va a bloquear y en un momento de la conversación no registrará más al vendedor. Se va a enfocar en otra cosa. Lo mismo ocurre si no hace pausas al hablar, si su voz es muy estridente, si grita o si susurra. A nadie le gustan esos mensajes de venta que suenan agresivos ¿Has notado que algunos vendedores tienen un tono de voz más intimidante que convincente?
Por eso, persuadir con la voz requiere entrenarse, de lo contrario no habrá un discurso creíble. Te repito, no estamos hablando de los argumentos. Estos pueden ser muy buenos, pero si son mal transmitidos no habrá comunicación exitosa.
¿Por qué crees que algunos políticos son más persuasivos que otros? Porque cuando los escuchamos sentimos que tienen un discurso creíble. Y para eso se preparan, se entrenan. Te cuento un secreto…muchos pasaron por nuestro Centro de Alto Rendimiento Vocal.
Entonces ¿Qué debes tener en cuenta para tener un discurso creíble y persuadir con la voz? Hablemos un poco de esto.
La velocidad de habla, un gran componente en un discurso creíble
Aunque parezca algo reiterativo, quiero insistir en el hecho de que no alcanza con los argumentos que exhibas para tener un discurso creíble. “No solo importa lo que dices, importa cómo lo dices”. Este refrán es bastante conocido, pero no todos le prestan mucha atención. Nuestra voz es el arma de persuasión más poderosa. Pero, si no controlas el ritmo del discurso, la velocidad de habla es posible que tu objetivo de convencer no se alcance.
Si hablas muy rápido quienes te escuchan no podrán seguirte, harán mucho esfuerzo y, de esta manera, les has agregado un elemento distorsivo al cerebro de los oyentes. Ya no habrá un discurso creíble porque pensarán que estás muy apurado en terminar de hablar.
¿Qué crees que pensarán los que te escuchan? No tengas dudas, “no está muy seguro de lo que dice, por eso quiere terminar rápido”. Y tú y yo sabemos que, en muchas ocasiones, hablas rápido porque estás nervioso. No estás acostumbrado a hablar en público.
Una práctica recomendada que puedes adquirir cómo hábito, si quieres persuadir con la voz, es controlar tu velocidad de habla. El ideal es tener un ritmo del discurso con una velocidad de 130 a 170 palabras por minuto. Puedes comenzar grabando tu discurso, una vez que lo escribas, y contar cuántas palabras por minutos tienes de promedio.
Un adecuado ritmo hará tu discurso mas creíble.
Para persuadir con la voz debes aprender a hacer pausas en tu discurso
Vamos a hablar un poco más del ritmo del discurso, pero esta vez dejamos de lado la velocidad y nos introducimos en otro tema vital. Las pausas al hablar.
Las pausas son importantes, tanto para ti como para tus oyentes. Por un lado, estos silencios breves al hablar te ayudan a respirar adecuadamente. Además, sirven para que tu audiencia “participe” de lo que estás diciendo ¡No te imaginas cómo ayuda esto a un discurso creíble!
Quienes tienen una gran capacidad para persuadir con la voz utilizan las pausas como aliadas. Existen diferentes tipos de pausas en el ritmo del discurso. Puedes profundizar sobre ellas en este artículo. Ahora mencionaremos de manera superficial algunas de ellas.
Las pausas colaboran cuando el orador debe cambiar de idea o pasar a otro tema. En esa breva pausa, los oyentes procesan lo que se dijo y están listo para oír sobre otro tema.
Existen pausas que ayudan a poner énfasis en una idea o crear una fuerte expectativa en el público. También invitan a participar cuando dejas una pregunta flotando en el aire.
Luego, las pausas serán de gran ayuda si notas que hay una distracción en el público. Algunos oradores se inclinan por levantar la voz si notan que no les están prestando atención ¡Esto no ayuda! Las pausas serán tus aliadas en estos casos.
Si quieres convencer con la voz, debes entrenarte
A diario te enfrentas con la necesidad de convencer a otros. Ya sea porque tu trabajo te lo demanda o porque estás en la búsqueda del empleo de tu vida. Tanto en una, como en otra situación, estarás frente a personas a las que deberás persuadir con la voz. Y, para convencerlas, es importante que sientan que tienes un discurso creíble.
Esta tarea de persuadir va desde un vendedor detrás del mostrador de una tienda, hasta el entrenador de un equipo profesional de básquetbol. Todos tienen una misma misión: convencer a otros de que algo es posible.